Asesoría Laboral, Fiscal y Contable
Asesoramiento Laboral:
Consiste en efectuar las gestiones en materia laboral de una empresa, así como de asesorar a los propietarios de esta para la observancia de la normativa vigente en materia laboral.
En definitiva, consiste en gestionar los aspectos relacionados con los trabajadores, como pueden ser:
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Elaboración y tramitación de los contratos de los trabajadores y las altas en la Seguridad Social.
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Gestión de las bajas laborales producidas por accidente laboral o enfermedad.
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Tramitación de los despidos.
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Asesorar sobre las obligaciones laborales de la empresa.
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Elaboración y ajuste de las nóminas.
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Procurar el cumplimiento de las normas vigentes, salvaguardando los intereses de las partes.
Este servicio permite ahorrar costes, optimizar la actividad empresarial y evitar riesgos.
Asesoramiento Contable:
Realiza la gestión económica de la empresa, de las facturas, así como de los balances contables.
Monitoriza y analiza la situación económica de la empresa para optimizar su gestión, traza estrategias económicas y resuelve la problemática contable.
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Asesoramiento en base al balance contable.
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Gestión y clasificación de los documentos contables.
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Facturas emitidas y recibidas.
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Cómputo de gastos.
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Libros contables obligatorios.
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Libro mayor de contabilidad.
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Elaboración de los asientos contables.
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Cumplimiento de la normativa vigente.
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Certificación de la aprobación de las cuentas anuales.
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Confección, revisión y presentación de los libros de cuentas ante el Registro Mercantil.
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Envío y legalización de las cuentas anuales en el Registro Mercantil.
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Cumplimiento del Plan General de Contabilidad.
Asesoramiento Fiscal:
Gestiona el cumplimiento de las obligaciones tributarias ante las administraciones.
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Ayuda en la gestión tributaria.
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Vela por el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
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Conocimiento de las novedades y modificaciones legales.
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Estudio de la contabilidad de la empresa para tener el menor impacto tributario posible, dentro del cumplimiento de la normativa.
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Estudio y asesoramiento en la creación de nuevas empresas y estructuras societarias.
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Elaboración de Impuestos de Actividades Económicas y declaraciones censales.
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Liquidaciones trimestrales de IVA, IRPF.
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Declaración y presentación de los impuestos de sociedades.
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Declaración y presentación del IRPF.
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Gestión de pagos fraccionados y retenciones.
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Asistencia, intervención y representación del autónomo o empresa ante la Inspección Tributaria.
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Gestión de requerimientos, comunicados con Hacienda y solicitudes de aplazamientos.
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Defensa fiscal, revisiones fiscales, recursos y reclamaciones, presentación de estos.[1]
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Gestión de apoderamientos.